Los sitios web que no cifren las conexiones con sus visitantes podrían ver reducida su clasificación en el buscador de Google. La medida impulsada por el buscador más importante del mundo es parte de una estrategia por promover la seguridad a todo nivel, debido al generalizado espionaje gubernamental.
Esta medida se busca estimular a los desarrolladores a implementar TLS (Transport Layer Security), un certificado digital para cifrar las transmisiones de información, representado por un candado en la mayoría de los navegadores, y el prefijo “https” al comienzo de una URL.
El procedimiento estándar, especialmente para sitios dedicados al comercio electrónico, o que requieren inicio de sesión, es utilizar cifrado para las conexiones entre el navegador de los usuarios y su propio servidor. Pero al contrario de lo que se espera, numerosas empresas desisten de tal práctica, lo que deja su sitio más susceptible a ataques en que se intercepten las comunicaciones.